Desde 2011, cuando se descubrió y describió la primera especie nueva para la ciencia en 2013 en la Reserva Natural Mesenia-Paramillo (MPNR), ampliar el conocimiento sobre la biodiversidad de la reserva se ha convertido en una prioridad. Para apoyar este esfuerzo, inicialmente se designaron dos áreas para estudiar vertebrados e invertebrados. Ahora, después de más de una década de investigación, se ha construido una nueva instalación que albergará ambos laboratorios y ampliará significativamente nuestra capacidad de exploración científica.
En junio de 2024, iniciamos la construcción de un edificio de dos pisos y 140 metros cuadrados (1400 pies cuadrados). La planta baja cuenta con una unidad de secado de plantas, un área multiusos para preparar muestras de campo, una sala de almacenamiento y un baño, mientras que el segundo piso albergará los laboratorios dedicados a estudios de vertebrados e invertebrados.
Inicialmente buscamos un contratista para construir las instalaciones, pero los altos costos nos llevaron a asumir el proyecto nosotros mismos. Para facilitar el trabajo, compramos una máquina soldadora MIG y Osman López, uno de nuestros guardaparques, rápidamente aprendió a dominar su uso. Bajo la dirección de Evelio Rendón, quien ha supervisado la construcción de la mayor parte de nuestra infraestructura, en octubre se completó el esqueleto metálico del edificio, sostenido por ocho columnas de concreto, algunas de las cuales alcanzan 3 metros (10 pies) bajo tierra. Una vez instalada la cubierta metálica pudimos pintar la estructura sin preocuparnos por las lluvias que caen a diario.
Antes de instalar las paredes, el cableado eléctrico y las conexiones se integraron en la estructura metálica. Andrés Cardona, técnico electricista calificado, completó la instalación cumpliendo con los códigos RETIE, garantizando la adecuada conexión a tierra de la estructura metálica para mayor seguridad y confiabilidad.
Las paredes fueron diseñadas para sostener paneles de fibrocemento, que fueron pintados y fijados firmemente a la estructura metálica. Para los pisos, también instalamos tableros de fibrocemento, rematados con una capa inferior silenciosa y un piso de PVC duradero diseñado para resistir derrames de líquidos.
El laboratorio de vertebrados inició operaciones en noviembre, con mejores condiciones para realizar estudios moleculares. Mientras que el laboratorio de invertebrados lo hizo en diciembre, después de garantizar un ambiente de baja humedad necesario para almacenar insectos de manera segura y prevenir el crecimiento de hongos. Eduardo Dos Santos, durante su quinta visita para estudiar los Pompilidae en la reserva, elogió las nuevas instalaciones del laboratorio, destacando su capacidad para albergar a varios científicos trabajando simultáneamente.
El próximo año, esperamos dar la bienvenida a varios grupos de investigadores para continuar el estudio de varios taxones, enriqueciendo aún más nuestra creciente lista de especies. También esperamos recibir a muchos visitantes deseosos de aprender y contribuir a nuestro apasionante proyecto de conservación.
¡Les deseo a todos un feliz y prospero Año Nuevo, lleno de esperanza y dedicación renovada para preservar la increíble biodiversidad de RNMP para las generaciones venideras!
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